Un tesoro ecológico en la costa murciana
Calblanque no necesita presentación para quienes conocen la riqueza natural del litoral murciano. Situado entre Cartagena y La Manga, el Parque Regional de Calblanque, Monte de las Cenizas y Peña del Águila es uno de los espacios naturales mejor conservados de la Región de Murcia. Con más de 2.700 hectáreas protegidas, su singular combinación de playas vírgenes, dunas fósiles, matorrales mediterráneos y salinas abandonadas lo convierte en un punto clave para la conservación de la biodiversidad.
Pero Calblanque también es un sitio ideal para quienes desean disfrutar de la naturaleza de forma responsable. A través de rutas ecológicas bien señalizadas y adaptadas a distintos niveles de forma física, este parque ofrece una experiencia inmersiva en el paisaje mediterráneo, con una dimensión educativa que permite comprender y valorar su fragilidad.
Senderismo con propósito: rutas para conocer y proteger
Más allá del paseo o la excursión de domingo, las rutas ecológicas en Calblanque están pensadas para promover un turismo sostenible y sensibilizado. El Instituto Murciano de Medio Ambiente (IME) y la Dirección General del Medio Natural han creado diversos itinerarios que permiten observar, interpretar y respetar los valores del parque.
Estas rutas atraviesan diferentes hábitats —montañas, ramblas, salinas, áreas de dunas y pinares— y facilitan el avistamiento de flora autóctona y fauna característica. A lo largo del camino, paneles interpretativos, miradores y zonas de descanso invitan a detenerse, aprender y reflexionar.
Rutas destacadas dentro del parque
Seleccionamos a continuación algunas de las rutas ecológicas más representativas de Calblanque. Todas ellas están integradas en el Plan de Uso Público del parque y son de acceso libre. Eso sí, en temporada alta (verano), el acceso con vehículo privado está restringido, por lo que se recomienda consultar previamente la política de transporte lanzadera disponible.
- Sendero del Cabezo de la Fuente (PR-MU 1): Con unos 4 km de recorrido circular, esta ruta asciende hasta uno de los puntos más altos del parque (235 m), desde donde se obtiene una panorámica impresionante de toda la costa calblanquina. A lo largo del sendero abunda el palmito (Chamaerops humilis), es posible observar lagartijas colilargas y, con suerte, algún ejemplar de águila perdicera.
- Ruta al Mirador de Punta Negra: Caminando desde el aparcamiento de Las Cobaticas, se trata de un recorrido lineal de 3 km (ida y vuelta) que bordea la costa. Es ideal para familias y permite apreciar distintos tipos de vegetación de litoral e interesantes formaciones geológicas. En primavera, florecen especies endémicas como la limonium carthaginense.
- Itinerario de Las Salinas: Recorrido muy accesible de apenas 2 km que atraviesa el antiguo complejo salinero. El área, declarada Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), acoge anualmente flamencos, cigüeñuelas y chorlitejos patinegros. Un paraíso para ornitólogos y fotógrafos de naturaleza.
- Senda de los Lentiscos: Ruta circular de 5 km con salida desde el Campamento de El Coto. Pasa por zonas de matorral mediterráneo dominado por lentisco (Pistacia lentiscus) y coscoja. En otoño se pueden observar frutos silvestres y escuchar el canto del ruiseñor bastardo.
Flora en detalle: un santuario silencioso
Una de las joyas de Calblanque es su riqueza botánica. Isabel Sánchez, bióloga de la Universidad de Murcia, nos recuerda que « en este parque se conservan más de 600 especies de plantas, varias de ellas endémicas o protegidas por su rareza ».
Entre las especies más destacadas se encuentra el siempreviva marina (Limonium caesium), que crece en las dunas costeras y es altamente sensible al pisoteo. También es abundante el albardín (Lygeum spartum), una gramínea que estabiliza los suelos erosionados.
No menos llamativas son las plantas medicinales que crecen en las zonas montañosas, como el hinojo (Foeniculum vulgare) o la salvia (Salvia lavandulifolia), ambas utilizadas tradicionalmente por las comunidades rurales para infusiones digestivas o como condimentos.
Fauna silvestre: más cerca de lo que imaginas
Lejos del bullicio humano, Calblanque sigue siendo refugio para especies que escasean en otros puntos del sureste ibérico. Entre sus habitantes discretos, encontramos al tejón común, al zorro y a varias especies de murciélagos.
Destaca especialmente la presencia de especies en peligro como el lagarto ocelado (Timon lepidus) o el camaleón común, reintroducido en años recientes con notables resultados, según los técnicos del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona).
En términos de aves, el alzacola rojizo (Cercotrichas galactotes), catalogado como vulnerable a nivel nacional, ha sido avistado en transición primaveral por los observadores locales. Las zonas húmedas del parque concentran además especies migratorias como el archibebe claro y la garceta común.
Buenas prácticas: cómo ser parte de la conservación
Caminar por Calblanque también implica asumir una responsabilidad. Al tratarse de un espacio natural protegido, existen reglas específicas destinadas a salvaguardar su integridad ecológica. Algunas recomendaciones fundamentales:
- Seguir siempre los senderos indicados, evitando pisar vegetación o áreas de regeneración activa.
- No recolectar plantas ni molestar a los animales, incluyendo insectos o reptiles.
- Evitar el uso de plásticos de un solo uso y llevarse siempre la basura.
- Respetar las zonas de baño restringidas y observar la señalización ambiental.
- Usar prismáticos y cámaras con discreción, sin invadir hábitats sensibles.
“El visitante tiene un papel crucial”, recuerda Pedro Gallego, guía ambiental de la Asociación Calblanque Natural. “Cada comportamiento cuenta, desde apagar el móvil para escuchar los sonidos del campo hasta alertar al personal del parque sobre posibles impactos o incidencias”.
Recursos para planificar tu visita
Si estás pensando en explorar Calblanque por primera vez —o volver a caminar sus senderos con una mirada renovada—, el Centro de Visitantes de Las Cobaticas es el mejor punto de partida. Allí podrás obtener mapas, consultar el estado de los senderos e informarte sobre actividades guiadas.
En temporada baja también se organizan itinerarios temáticos, como rutas botánicas centradas en plantas aromáticas o salidas de observación astronómica, gracias a la escasa contaminación lumínica del parque.
Además, la app Senderos de la Región de Murcia, disponible para Android e iOS, ofrece información geolocalizada, datos técnicos de cada ruta y alertas sobre condiciones meteorológicas, todo con acceso offline.
Una invitación a redescubrir nuestro entorno
En tiempos donde el vínculo con la naturaleza parece diluirse, caminar por espacios como Calblanque se convierte en un acto de reconexión. Rutas ecológicas como las que aquí hemos descrito no solo nos acercan a paisajes de inigualable belleza, sino que nos enseñan a mirar con otros ojos: con respeto, atención y curiosidad.
Y tú, ¿cuándo fue la última vez que escuchaste el crujir de una hoja seca bajo tus pies o percibiste el aroma del tomillo tras una lluvia ligera? Tal vez Calblanque te lo recuerde. No hay que ir lejos para encontrar lo valioso. A veces, basta con andar despacio y estar presente.